Waldazos de ahogado

Cuando la población elige a sus autoridades seguramente lo hace con mucha ilusión y expectativa pensando que este sí cumplirá todas sus promesas y no los defraudará como los anteriores. La historia vuelve a repetirse y cada vez peor.

En la última sesión extraordinaria donde se reunieron los 24 representantes de cada provincia, para definir dos temas: La reconsideración presentada por el encarcelado Waldo Ríos Salcedo al acuerdo donde se determinó su suspensión por 120 días y otro, la donación del terreno del gobierno regional al MINSA, para la construcción del nuevo hospital de Huaraz.

Volvamos al primer tema de la reconsideración waldista, es aquí donde los defensores waldistas sacaron a relucir todas sus armas con tal de lograr que los consejeros independientes amedrentados por los insultos de los consejeros de Sihuas, Antonio Raimondi, los dos representantes de Caraz, Carhuaz y otros que completan la banda, perdón, la bancada waldista; se allanen a su pedido.

Los independientes declararon la admisibilidad de su recurso por haber sido presentado a destiempo (13 días después), el consejero de Yungay Pedro Izquierdo aleccionó a su colega Morillo de Sihuas que con gritos e insultos no se sustenta el pedido, aquí se respeta la ley y punto, apagó al bullanguero Morillo.

Siguiente punto de la agenda, la transferencia del terreno al MINSA para la construcción del nuevo hospital para Huaraz, nivel tres uno. La mayoría independiente estuvo de acuerdo y adelantaba su decisión de apoyar esta iniciativa del gobernador Enrique Vargas, pero ¿que hicieron los consejeros waldistas?

La cosa se puso peor que en la anterior, como no lograron la reconsideración buscaron la sinrazón  de oponerse a este pedido, “claro, como no es de nuestro Waldo Ríos, nos traemos abajo esto, cuchicheaban los viudos (as) del encarcelado”.

En este punto también hicieron de todo para tumbarse el proyecto, hasta preguntaron qué color iba a tener el nuevo hospital y quien iba ser el primer paciente atendido…Pero como otra vez se veían derrotados no les quedó otra que votar a favor de la transferencia.

Está claro quienes están a favor de solucionar las necesidades que tiene la golpeada región  Ancash y quienes simplemente defienden sus intereses o protegen a Waldo Ríos.

Seguramente con la esperanza de que algún día salga de la cárcel, para juntos seguro sigan haciendo de las suyas, continuar con los faenones, engañar y hacer llorar a los niños con el cuento de la chocolatada, o estafar a los discapacitados prometiéndoles regalar sillas de ruedas.

Esperemos más novedades, pataletas o algún otro acto inhumano que traigan los integrantes de la banda, perdón la bancada waldista, aunque me dicen por ahí que pedirán al consejo regional, apruebe la venta de panetones de Waldo Ríos para el bolsillo de sus consejeros más fieles.