Las ministras de Salud, Patricia García Funegra, y de Justicia y Derechos Humanos, Marisol Pérez Tello, se reunieron hoy con alcaldes para coordinar acciones de ayuda humanitaria y desplazamiento a las provincias ancashinas de Casma, Huarmey y otras zonas afectadas por las inundaciones provocadas por las torrenciales lluvias.
Ambas ministras llegaron a Chimbote a bordo de una aeronave de la Marina de Guerra, llevando bienes de ayuda humanitaria para las poblaciones damnificadas y supervisar el despliegue del puente aéreo establecido para trasladar a quienes lo requieran hacia Lima y viceversa.
En ese sentido, la titular de Salud dialogó con el almirante Gonzalo Ríos Polastri, comandante general de la Marina de Guerra, y el general Retto Jiménez, comandante de la Primera División del Ejército-Norte las intervenciones a favor de los habitantes en las provincias ancashinas de Casma y Huarmey, que han resultado más dañadas por los embates de la naturaleza.
La ministra García dispuso el traslado, mediante el puente aéreo, de dos pacientes en condición grave desde Chimbote hacia Lima, donde serán atendidas en el hospital Dos de Mayo.
También envió dos grupos de brigadistas de salud hacia Casma y Huarmey para auxiliar y dar atención médica a la población afectada.
La ayuda humanitaria que se llevó a las provincias de la región Áncash consiste en medicinas, agua potable y alimentos.
La ministra también coordinó la instalación de un hospital de campaña, teniendo en cuenta que la población en estas condiciones es altamente vulnerable a contraer enfermedades infecciosas como el dengue, dermatológicas, oftálmicas y gastrointestinales, tras estar expuesta al contacto con aguas estancadas y servidas, así como ante la carencia de agua potable y alimentos. También corre peligro de sufrir contusiones, cortes y lesiones de diversa índole, así como mordeduras de arañas, serpientes y otros animales ponzoñosos.