Una gran improvisación es lo que se viene notando en la mayoría de las agrupaciones regionales, locales y partidos políticos que se aprestan a participar en los comicios del año entrante.
Los movimientos regionales ya habilitados están con serios problemas en su interior: el MANPE con un serio éxodo de quienes colaboraran cercanamente con su líder Lombardo Mautino, su hermano Rory parece no llenar el enorme vacío dejado por el mentor; Río Santa Caudaloso con las broncas públicas entre Victoria Espinoza y el fundador del movimiento Guzmán Aguirre además de la débil gestión regional encargada del riosantista Luis Gamarra; Andemar, no ha crecido en su organización y solo podría apoyarse en la reconocida figura artística de Sonia Morales a la par cónyuge de su fundador Ricardo Narváez; El Macito, buscando acoger a los tránsfugas o ser vientre de alquiler pero sin el liderazgo claro de su líder Vladimir Meza quien parece haber sentado raíces sólo en Lima y Puro Ancash con su líder Waldo Ríos preso y las promesas demagógicas que en la práctica han resultado ser un tremendo fiasco para la colectividad regional.
Entre las nuevas agrupaciones que se preparan y pugnan por su reconocimiento, sólo Hora Cero de Luis Haro está cercano a su reconocimiento y tiene probables candidatos definidos en plazas electorales exigentes como Huaraz (Luis Natividad) y Chimbote (Norma Alencastre), mientras Luis Briceño de Manos a la Obra, Víctor Capistrán de Recuperemos Ancash, Valentín Fernández de Vale Ancash, Gabriel Mejía Duclós de Fuerza Ancash, siguen sudando la gota gorda por ser reconocidos. Alguno de ellos finalmente puede quedarse “tirando cintura”. El tiempo apremia.
Aparte de ellos hay igualmente otros 40 movimientos regionales que esperan correr contra el tiempo con la recolección de firmas y obtener el reconocimiento, pero esa aspiración parece estar más lejos que la cara de Dios.
Hay también otros candidatos reconocidos pero sin agrupación como el economista Luis Luna Villarreal que hizo una ilustrativa conferencia de prensa pero cuando se le preguntó con quién iba dijo que “estaba estudiando invitaciones”. Lo que en el fondo es también improvisación, que él mismo critica.
Entre los movimientos provinciales y distritales existen en estos momentos 33 pugnando por su reconocimiento en medio de una profunda improvisación e informalidad.
Y en los partidos políticos sólo Somos Perú, con el liderazgo de Juan Carlos Morillo, viene consolidando un trabajo de bases y ya con precandidatos en varias provincias de la región, lo cual es encomiable.
¿Y los demás partidos políticos? La flamante coalición izquierdista Juntos por el Perú anuncia hasta tres precandidatos como: Leandro Cerna, Helvezia Balta y Edver Paredes, pero todavía huele a sancochado político. El APRA, PPC, ACCION POPULAR, FUERZA POPULAR y otros también esperando también la última hora.
A 14 meses de los decisivos comicios regionales y locales, el panorama no puede estar más que incierto, informal e improvisado.