Sorpresivamente el 28 de octubre, al mediodía, la familia Chávez Ramírez ingresaron a propiedad de la empresa Greenex SAC lanzando piedras y amenazas de muerte a los vigilantes (como se evidencia en un video que fue grabado) para proceder a la construcción de una choza en un área protegida por el Instituto Nacional de Cultura.
Pobladores del caserío de Yacucancha denunciaron que esta familia realiza este tipo de actos para sus intereses personales (como ya ha ocurrido en sus hostilizaciones a otras empresas) y no en beneficio de la población, pese a que la referida empresa genera trabajo de manera rotativa.
José Espinoza, trabajador de la empresa y poblador de esa zona, dijo que con esta actitud la familia Chávez pretende obstaculizar los trabajos que actualmente benefician a más de 20 familias.
Filemón Marchena Chauca, poblador del caserío de Yacucancha, denunció también que la familia invasora toma el nombre del caserío como si fuera una comunidad, buscando su lucro personal procediendo incluso a la agresión como arrojar piedras a los trabajadores y montando una campaña mediática para hacer creer que existe contaminación porque están en explotación, cuando en la práctica están comenzando con las obras civiles de acondicionamiento y que cuentan con los permisos correspondientes.
Por su parte Hilda Ramírez, también pobladora del lugar, destacó que la empresa viene generando empleos de manera rotativa especialmente apoyando a las madres solteras.
Desalojan a invasores
Ante este hecho irregular que se vio acompañado de una campaña mediática de desprestigio la empresa Greenex con los documentos correspondientes que amparan su propiedad y operaciones el pasado 9 de noviembre procedió con el apoyo de la Policía Nacional y el Ministerio Público a proceder a la recuperación de los terrenos ocupados irregularmente por la familia Chávez Ramírez.