Pastorita Huaracina, no ha muerto: vive. Puede resumirse del conjunto de actividades que se han cumplido durante la última semana para conmemorar el décimo octavo aniversario de su desaparición como máxima intérprete de la música ancashina.
María Alvarado Trujillo, recibió sendos tributos de parte de la Municipalidad de Lima Metropolitana, que ha institucionalizado el homenaje desde hace muchos años, propiciada básicamente por su hija Elena Romero Alvarado, quien conduce con éxito un programa radial y de redes en Andina y respaldada por los artistas del ande que se dieron cita a las actividades que para el efecto se programaron.
En efecto, en la iglesia de Santo Domingo se ofició la misa en memoria de su alma y luego los artistas ancashinas que laboran en Lima, como en Huaraz y varios puntos del país se dirigieron al Parque de la Muralla donde se realizó una velada musical del recuerdo, interpretando sus mejores éxitos.
En Huaraz
Esta vez, la iniciativa partió de parte de la Dirección Desconcentrada de Cultura y la Municipalidad de Independencia. A las 11 horas se ofició una misa en el sagrario San Sebastian, para luego dirigirse al paseo turístico que en el barrio de Independencia lleva su nombre y efectuar el gran homenaje musical póstumo en su honor.
Participaron en esta oportunidad los artistas Wilbert Aráoz, Pepe Minaya, Anita Fajardo, Liz Andahua, La Muñequita Danny, el marco musical de Melodías Andinas, que dirige el gran músico Víctor Depaz Fernández.
El público asistente bailó espontáneamente haciendo gala de la gracia y el donaire que invita la ejecución de la chuscada ancashina, del cual Pastorita fue la Reina y Señora.
Una vez más también se hizo presente el periodista y locutor David Rosales, uno de los mejores difusores de la música ancashina y huaracina, que estuvo a cargo de la notable conducción que lo caracteriza.