El verdadero origen del Día del Padre surge el 19 de junio de 1909 en Estados Unidos, cuando una mujer llamada Sonora Smart quiso homenajear a su padre, Henry Jackson Smart.
Este veterano de la guerra civil se convirtió en viudo cuando su esposa murió en el parto de su sexto hijo.
Fue en una granja rural en el estado de Washington donde Henry Jackson se hizo cargo de la educación de seis niños.
Sonora Smart se dio cuenta de que su padre fue un ejemplo a seguir y propuso la fecha del nacimiento de su papá, el 5 de junio, para celebrar el Día del Padre.
La idea de crear esta simbólica fecha fue apoyada en diversas ciudades.
Pero no fue hasta 1966 que el presidente Lyndon Johnson firmó una proclamación que declaraba el tercer domingo de junio como Día del Padre en Estados Unidos.
En otros países
Esta fecha especial se celebra en el Perú, así como en la mayor parte de América, el tercer domingo de junio.
En Argentina, el primer festejo se realizó un 24 de agosto de 1958, en honor a José de San Martín, considerado Padre de la Patria.
Años más tarde se modificó el día en el calendario y se decidió que se realice en el mes de junio.
En Bolivia, Honduras y España, donde se relaciona con la Festividad de San José, padre de Jesús de Nazaret, se celebra el 19 de marzo.
En Brasil, en cambio, se celebra cada segundo domingo de agosto; en República Dominicana es el último domingo de julio; y en Guatemala y El Salvador el festejo es el 17 de junio.
Los regalos y sorpresas que los hijos ofrendan a sus padres generan un gran movimiento comercial en la víspera.
Independientemente del día que se recuerde en cada país, es una forma de honrar a nuestros padres que con esfuerzo, amor y voluntad trabajan para darnos lo mejor.