Julia Dewilde tiene mucho que celebrar. Esta anciana belga abandonó el miércoles el hospital tras recuperarse del nuevo coronavirus, entre aplausos del personal de enfermería y solo cuatro días después de cumplir 100 años. «Es una de nuestras mejores historias de éxito. Nos reconforta», celebró Laura Bertrand, la enfermera que se ocupó de ella durante sus 19 días en el centro hospitalario Bois de l’Abbaye en Seraing, cerca de Lieja (este de Bélgica).
Instalada en una silla de ruedas, Julia Dewilde cruzó el vestíbulo entre aplausos, frente a una nube de cámaras, antes de recibir un ramo de flores con el mensaje «Feliz Cumpleaños» por sus 100 años cumplidos el 25 de abril. Su alta podría haber coincidido exactamente con su aniversario, pero tuvo que esperar los resultados del «test negativo» de la COVID-19 que confirma oficialmente su recuperación, explica a la AFP Nicolas Petterle, portavoz del centro.
Hospitalizada por problemas respiratorios, a Dewilde le diagnosticaron el contagio por el nuevo coronavirus a mediados de abril, especialmente mortal para los ancianos. Sin embargo, no necesitó ni ser intubada, ni cuidados intensivos. Su tratamiento consistió en antibióticos, junto a «un apoyo de oxígeno adaptado a sus necesidades e hidratación», explicó otro cuidador de la centenaria mujer que, ante los periodistas, no pudo pronunciar palabra antes de su traslado en ambulancia.
«Sí, vendrán mañana. Yo los veré mañana. Me sentará bien», aseguró la víspera la mujer al personal sanitario, en referencia a sus familiares, obligados a esperar el visto bueno de la residencia de ancianos para poder visitarla.
Bélgica, país de unos 11,5 millones de habitantes, contaba el miércoles más de 7500 muertos por el coronavirus, en su mayoría personas de más de 75 años. La mitad de los decesos se produjeron en el hospital y la otra mitad en residencias de mayores.
Con información de América Noticias y AFP.