El Atlético de Madrid del Cholo Simeone vive una época de esplendor como muy pocas veces había experimentado. Se codea dignamente con los mejores equipos de Europa y, en la competición doméstica, es capaz de unirse a la eterna pelea entre Real Madrid y Barcelona. El pasado miércoles dio otra muestra de ello al volver a clasificarse para octavos de la Champions.
Siete clasificaciones en ocho años
El combinado rojiblanco no solo ha sido capaz de clasificarse para la máxima competición europea los últimos ocho años. También ha logrado, dentro de ella, alcanzar los octavos de final en siete de estas participaciones.
Solo una vez fue no pudo hacerlo: en la temporada 2017-18. Esa edición no fue buena para los de Simeone. En la fase previa solo cosecharon una victoria contra la Roma por dos goles a cero. El resto fueron empates contra el Qarabag, la propia Roma y el Chelsea, junto a una derrota ante este último. Como consecuencia, el equipo madrileño se vio eliminado y entró en la Liga Europa, segunda competición continental.
En cambio, durante estos ocho años ha jugado dos finales de Champions, precisamente ante su eterno rival, el Real Madrid. Perdió ambas, pero especialmente dolorosa fue la derrota de Lisboa en la temporada 2013-14. Porque en el minuto 93 de ese partido iba ganando por un gol a cero y vio como el rival empataba gracias a un gol de Sergio Ramos. Hubo que ir a la prórroga y en ella el Real Madrid marcó otros tres tantos.
Justamente su vecino de ciudad ha sido el gran enemigo del Atlético en estos años pues, además de vencerlo en esas dos finales, lo eliminó de la competición en otras dos ediciones, una vez en cuartos y otra en octavos de final.
La clasificación en la presente temporada
Desde que perdió las dos finales, el club rojiblanco se ha obsesionado con obtener el máximo título europeo. Con esa intención partía esta temporada. Y, de momento, ya está clasificado para la eliminatoria de octavos. Pero no ha sido fácil.
Encuadrado en el grupo A, comenzó perdiendo el primer partido de la liguilla ante el Bayern de Múnich por cuatro goles a cero. Además, tres empates, dos ante el Lokomotiv de Moscú y uno ante el propio Bayern, complicaron aún más su clasificación. Entremedias, había ganado por tres a dos al Salzburgo.
La caprichosa suerte hizo que en la última jornada se enfrentaran nuevamente el cuadro rojiblanco y el Salzburgo. Si vencía en equipo austríaco, se clasificaba, mientras que el empate y la victoria daban el pase al Atlético. Finalmente, en un partido nada sencillo para los madrileños, estos obtuvieron la victoria por cero a dos, con goles de Mario Hermoso y Yannick Carrasco. Así, el equipo rojiblanco lograba su séptima clasificación para octavos de final de la Champions en ocho años.
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