La comuna provincial pretendió clausurar temporalmente, las galerías denominadas La Cachina, esto por presunta receptación de bienes robados; sin embargo, las protestas no se dejaron esperar; varios propietarios de puestos mostraron tener facturas de artefactos y celulares; como resultado, al final, la disposición quedó en suspenso.
Nuevamente las autoridades municipales procedieron a clausurar de manera temporal La Cachina, en cumplimiento a una disposición de la Fiscalía, por la receptación de bienes robados en esta zona; sin embargo los propietarios mostraron facturas que ahora serán puestas a disposición del Ministerio Público.
Desde al año 2019 la Gerencia de Servicios Públicos dispuso que este establecimiento se cierre definitivamente, por no haber cumplido con las licencias de funcionamiento y certificados de Defensa Civil.
Tras una serie de diligencias, la autoridad municipal procedió a clausurar de manera temporal, dicho establecimiento, por haberse agotado todos los procedimientos administrativos y legales.
Sin embargo, algunos propietarios salieron al frente presentando una licencia municipal para la venta de artefactos eléctricos y accesorios de celulares que se la había otorgado.
Al final de la intervención municipal quedó pendiente el cierre definitivo de dicho establecimiento, por contar con la referida autorización municipal.