El Qhapaq Ñan estuvo articulado no sólo por extensos centros administrativos, como Vilcahuasmán, Pumpu, Huánuco Pampa, Aypate, Tomebamba, entre otros; sino también se articulaba a una red de santuarios y oráculos como Catequil o Pachacamac.
Un claro ejemplo fue Huarirraga o Inkarraga, un centro religioso ubicado en la naciente del Callejón de Huaylas, al sureste de la ciudad de Cátac, entre las Cordilleras Blanca y Negra.
En este sitio enigmático se vienen realizando investigaciones arqueológicas por parte de un equipo de arqueólogos de las universidades San Marcos, Antúnez de Mayolo y Federico Villarreal.
Los estudios permitirán escudriñar el rol que cumplió el santuario de Huarirraga vinculado a una red de caminos prehispánicos que se distribuían sobre los 4000 msnm.
La investigación de las redes viales y los sitios vinculados es una primera etapa, en la consolidación de la Puesta en Valor o uso social de nuestro patrimonio cultural en la región.