El líder del Movimiento Regional Alianza, Gobierno, Unidad y Acción (AGUA) deploró que los partidos políticos representados en el actual Congreso hayan abogado por la contrareforma al dejar sin efecto las elecciones primarias que estaban ya reglamentados «más por su instinto de supervivencia que por el bien del país».
«Varias de esas agrupaciones son cascarones, sino preguntémonos qué liderazgos fuertes tienen en nuestra región donde en las ultimas elecciones regionales y municipales fueron barridos por los movimientos regionales, es una pena que se siga apostando por la fragmentación, porque si se cumplía la Ley, las primarias hubiera contribuido para que pocas agrupaciones pasen a la gran final de octubre y así las nuevas autoridades sean masivamente respaldadas y no como actualmente ocurre que hasta con un 16% alcancen el gobierno regional o local» apuntaló.
Fortalecimiento de su agrupación
Por otro lado informó que su agrupación cuenta actualmente con 17 mil afiliados en toda la región tanto en la costa como en la sierra, habiéndose convertido en la primera organización que se adecuó a la Reforma Electoral, toda vez que las demás agrupaciones solo fueron reconocidos con adherentes y recién vienen adecuando sus estatutos y cumpliendo con la instalación de comités provinciales que exige la Ley.
«En el caso de AGUA, tenemos precandidatos en todos los distritos de Ancash, en muchos lugares incluso van a ver saludables competencias entre militantes, y eso es bueno para la democracia; en el camino se han ido sumando también personas muy importantes que tienen una gran vocación de servicio y sobre todo experiencia en el campo político que le dan otro cariz a la organización; lo que pretendemos es cambiar la forma de gobernar la región y desterrar los actos de corrupción que impiden hasta el momento la ejecución de las obras de desarrollo que requiere Ancash» subrayó.
Mesa de diálogo
Por otro consideró que el día de hoy el clave para la gobernabilidad de la región, y se pueda superar el conflicto social que desde hace casi quince días tiene en vilo a Ancash con el paro que decretó la comunidad de Aquia en sus demandas que tiene ante Antamina.
«Respaldamos a la comunidad y creemos que es importante se fije una nueva agenda social, se abra una mesa de diálogo y la minera como el Estado tome mayor consideración a las localidades donde hay impacto por la actividad minera y que hasta el momento no han sido consideradas como zona de influencia», manifestó.