Se trata Sarah Yearicks de 31 años de edad, quién a sus 31 años es la ingeniera mecánica de raíces de la provincia de Pomabamba de la región Áncash que forma parte de la histórica misión Mars 2020 Perseverance de la NASA.
Sarah – quien nació y se crió en Los Ángeles, California, y desde muy pequeña su amor por el quechua nació, así como su curiosidad por la ciencia.
Recuerda que cada dos años viajaba al pueblo de su abuelo en Áncash, llamado Carhuachuna, provincia de Pombamba, se tomaba fotos en el campo y en las piedras que curiosamente hoy estudia en el laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA.
Contó a la Agencia de Noticias Andina, que no hay ningún día aburrido en su trabajo porque siempre aprende algo nuevo. Su trabajo requiere de mucho conocimiento de ciencia de materiales, geología y química. Sin embargo, ella estudió Bioquímica en el Mount Saint Mary’s University en Brentwood California, una universidad de mujeres que siguen carreras de ciencias.
“Fue muy difícil los estudios en la universidad. Cuando yo estudiaba hasta las 2 de la mañana cálculo matemático, mi abuelo me decía: ‘No te rindas, límpiate las lágrimas y sigue adelante’”, recuerda.
Confiesa que no ha sido nada fácil. Es todo un desafío hablar en quechua pero lo hace con mucho cariño y por el orgullo de llevar este idioma a la NASA.
Fue así con mucho esfuerzo y dedicación que llegó a la NASA. Se encontraba en el penúltimo año de su carrera de bioquímica cuando postuló a una pasantía e ingresó a trabajar en el grupo de protección planetaria, que se encarga de tener bajo los niveles de contaminación biológica en los rovers. Ese fue el inicio de la exitosa carrera de la ingeniera que no se olvida de sus raíces: Perú y México