Soledad Rodríguez, jefa de la oficina defensorial de Áncash, manifestó que, es fundamental que el gobierno local sea capaz de influir en estos procesos de manera efectiva y sostenible, en coordinación con el Serenazgo, la policía municipal y la Policía Nacional. Es necesario que se establezcan estrategias claras y bien planificadas para garantizar que este ordenamiento sea duradero y eficaz.
Además, dijo que la reciente decisión de implementar un ordenamiento comercial en nuestra ciudad es un paso necesario hacia el cumplimiento de una sentencia del Tribunal Constitucional, que ha permanecido sin ejecutar durante demasiado tiempo.
«Es crucial reconocer la importancia de contar con un entorno urbano seguro y transitable para todos los ciudadanos. Sin embargo, nos preocupa que la ejecución de este ordenamiento dependa en gran medida de la presencia policial, lo cual puede no ser sostenible en el tiempo», aseveró Soledad Rodríguez.
Es evidente, dijo con seguridad, que se necesita reiteración de operativos, ya que de manera esporádica no es suficiente para mantener el orden en las calles y así evitar la reocupación de espacios públicos por parte de los comerciantes.
«Instamos al gobierno local a reorientar sus esfuerzos y a intensificar sus acciones para lograr un ordenamiento comercial que sea verdaderamente sostenible en el tiempo y que beneficie a toda la comunidad. La eficacia y la planificación adecuada son fundamentales para garantizar el éxito de esta iniciativa y para evitar que los recursos públicos se vean malgastados», concluyó la jefa de la defensoría del pueblo.