En una emotiva ceremonia celebrada en el Congreso de la República, el destacado deportista chacasino Ronald Ronaldo Sifuentes Cueva fue reconocido por su destacada labor en el campo deportivo.
El reconocimiento fue entregado por la congresista Lady Camones, quien destacó el talento innato de Sifuentes Cueva y su valiosa contribución al deporte nacional. La primera medalla internacional obtenida por Ronaldo no solo es un logro personal, sino un motivo de orgullo para todo Chacas y el departamento de Áncash.
Ronaldo consideró el apoyo constante y la orientación de sus padres, Ronald Sifuentes Aguirre y Soledad Cueva Fernández, fue fundamental en su desarrollo deportivo, y su ejemplo inspira a muchos jóvenes en su comunidad y en el país. «Este premio lo ha recibido en el congreso. Es muy bonito jugar al fútbol rey», dijo Rolando.
A pesar de su corta edad, va dejando huellas en el mundo del deporte, representando con honor a su país y su hogar. Su determinación y sacrificio son ejemplos claros de que el éxito se alcanza con trabajo arduo y dedicación.
«Primero, saludar a la provincia de Asunción Chacas y agradecer a todos los integrantes de Internacional Ancón que nos acompañaron por el logro que ha tenido mi hijo. Estoy muy contento por el logro de mi hijo y esto me anima para seguir apoyando. Agradezco bastante a la congresista Lady Camones, quien hizo posible este reconocimiento. Muy contento por todos los chicos, por Ronaldo. Hemos ido a recibir una copa a nivel internacional representando al distrito y al país. Ronaldo tiene muchas condiciones para llegar a jugar en el fútbol profesional», expresó también el padre de Rolando.
Condecoración
«Orgullo de Áncash: Reconocimiento a Personas Ilustres e Instituciones Representativas», marcó un hito importante para Sifuentes Cueva, quien ha destacado como titular del equipo Internacional Ancón y recientemente quedó subcampeón en la Copa Latinoamericana de Fútbol, celebrada en Paraguay.
Para Chacas y la región de Áncash, Ronaldo Sifuentes Cueva es más que un deportista destacado; es un símbolo de esperanza y un modelo a seguir para las generaciones futuras. Su reconocimiento es un tributo merecido a su talento y dedicación, y sirve como un recordatorio de que los sueños pueden hacerse realidad con esfuerzo y perseverancia.