Ex congresista de Áncash, Fredy Otárola Peñaranda, dijo tajantemente que la bicameralidad es necesaria y evita populismos, pero que sus requisitos son discriminatorios. En medio de la coyuntura política nacional, surge el debate sobre la implementación de la bicameralidad. Si bien esta reforma constitucional ha sido recibida con cierta ambivalencia, se reconoce su potencial para fortalecer el sistema legislativo y representativo del país.
Según el ex congresista, la creación del Senado busca, en gran medida, asegurar una representación más equitativa y diversa de la ciudadanía, con la participación de ciudadanos destacados en el ámbito nacional. Sin embargo, la forma en que se han introducido ciertos aspectos en la legislación ha suscitado críticas y preocupaciones.
«Uno de los puntos más controversiales es la cuestión de la reelección congresal y los privilegios otorgados a ciertos sectores. La inclusión de cláusulas que permiten a excongresistas postular al Senado sin cumplir los 45 años si es que ha sido congresista anteriormente, mientras que un ciudadano cualquiera menor de 45 años no puede postular, eso es discriminatorio y por ende inconstitucional», afirmó Fredy Otárola.
Sin embargo, dijo el ex congresista, la eficacia del Senado como cámara de reflexión y contención, es cuestionada por su proceso de funcionamiento. La implementación de una segunda votación en lugar de un verdadero debate reflexivo es objeto de críticas sobre la utilidad real de esta institución y su capacidad para cumplir con su propósito.
«En este sentido, urge una reflexión profunda sobre los desafíos y las oportunidades que presenta la bicameralidad y la creación del Senado. Es necesario garantizar que esta institución cumpla con su rol de representación y contención, promoviendo así un sistema legislativo más equitativo, transparente y democrático para todos los ciudadanos», aseveró.