Hace 27 años, en esta misma fecha, el párroco Daniel Badiali, sin presagiar su destino trágico, elevaba sus plegarias al Altísimo. Los que aún guardan su memoria, evocan su humildad y su capacidad para difundir el evangelio con un ejemplo vivo y los valores cristianos, siempre acompañado de su guitarra, que resonaba con melodías de esperanza y redención.
Cada año, como una reverencia a su legado, la parroquia de San Luis, junto con otras de la Zona Conchucos, organizan una peregrinación hacia el lugar conocido como Acorma, donde los devotos imploran por un milagro y rezan con fervor y fe. Fue el padre Daniel uno de los primeros en seguir los pasos de la misión del padre Ugo de Censi.
En las primeras horas de esta madrugada, a las 4:30 a.m., cientos de jóvenes ya han iniciado su peregrinaje desde Chacas y diversos puntos de la región, marchando con determinación hacia el lugar donde yace la memoria del padre Daniel.
Badiali Massironi fue un sacerdote salesiano, cantautor y misionero italiano, miembro de la Operación Mato Grosso. Trabajó como sacerdote misionero en la sierra oriental de Áncash, primero en Chacas, ayudando al padre Ugo de Censi y luego en San Luis donde fue párroco hasta su asesinato en el invierno de 1997.