En declaraciones recientes, Erika Alegre Quito, coordinadora regional del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS), expresó su preocupación por el creciente índice de anemia en la región Áncash. Según sus declaraciones, el aumento del 1.5% en la población infantil este año es motivo de alarma y requiere una acción concertada de todos los actores involucrados.
Alegre Quito destacó que este problema no puede atribuirse únicamente a la falta de acción por parte del Gobierno Regional, los gobiernos locales o el sector salud, sino que requiere un enfoque integral que involucre a todos los sectores pertinentes. «La anemia es responsabilidad de todos, y debemos trabajar juntos para abordarla de manera efectiva», señaló.
La coordinadora del MIDIS resaltó la importancia de fortalecer la atención primaria y preventiva, haciendo hincapié en la necesidad de garantizar que los servicios de salud lleguen de manera adecuada a las gestantes y niños de la región. Asimismo, hizo referencia a la importancia de promover prácticas saludables, como el consumo de agua clorada, para combatir no solo la anemia, sino también otras enfermedades prevalentes como el dengue.
En este sentido, Alegre Quito hizo un llamado a los gobiernos locales para que asuman un rol protagónico en la implementación de medidas preventivas y en la mejora de los servicios de salud en sus respectivos territorios. Además, destacó la importancia del trabajo conjunto entre el Gobierno Regional y los municipios para garantizar el cumplimiento de los estándares de atención y servicio.
Por último, la coordinadora del MIDIS subrayó la necesidad de priorizar el desarrollo social en la región, junto con el desarrollo económico, como una medida fundamental para combatir la pobreza y mejorar la calidad de vida de la población. En este sentido, instó a todos los actores involucrados a redoblar sus esfuerzos y trabajar de manera coordinada para enfrentar el desafío de la anemia en la región Áncash.