En el distrito de Independencia (Huaraz), desde las 10 de la mañana de este viernes 31 de mayo, se llevó a cabo un simulacro multipeligro a nivel nacional, el cual puso a prueba la capacidad de respuesta ante un desastre de gran magnitud. El ejercicio, que simula un sismo de 8 grados seguido de un aluvión, dejó un saldo preliminar de 5,000 personas heridas, 2,000 atrapados, 1,500 fallecidos, 450 desaparecidos y cientos de viviendas destruidas.
El puente Rosario fue identificado como uno de los puntos críticos del simulacro. Las autoridades locales destacaron la importancia de estos ejercicios para preparar a la población y mitigar los efectos de posibles desastres naturales. Durante el simulacro, se observó la paralización del tráfico vehicular y la activación de sirenas de emergencia, mientras serenos y policías apoyaban en la gestión del tránsito en varios puntos de la ciudad.
Sin embargo, el alcalde de Huaraz David Rosales Tinoco expresó su descontento con la policía y el ejército por no participar activamente en el simulacro. «Es crucial que todas las fuerzas de seguridad se involucren en estos ejercicios para asegurar una respuesta efectiva en caso de una verdadera emergencia», declaró.
Acciones durante el simulacro
El simulacro incluyó la simulación de rescates en el puente Rosario, con equipos de bomberos y unidades de rescate realizando operaciones para salvar a personas atrapadas. «Este tipo de ejercicios nos permite identificar debilidades y mejorar nuestras capacidades de respuesta ante un desastre real», señaló una autoridad local.
El simulacro se lleva a cabo hoy, 31 de mayo, en conmemoración de los 54 años del devastador terremoto de 1970, que afectó gravemente a la región de Áncash y dejó un saldo de más de 70,000 fallecidos y 20,000 desaparecidos. Este evento histórico resalta la necesidad de estar preparados para enfrentar futuros desastres naturales.
En el marco del ejercicio, también se han instalado puestos de atención médica y carpas de emergencia, demostrando la colaboración de diversas entidades y la importancia de la participación comunitaria. «Es fundamental que la población no solo observe, sino que participe activamente en estos simulacros», enfatizó un representante de la defensa civil.
Lecciones del sismo de 1970
«Toda lección, todo pasado nos deja una lección. La lección hay que aprenderla y hay que monitorearla. Hay que hacer que lo que sucedió hace 54 años no ocurra con el alto número de muertos; hubo 70 mil personas fallecidas, lo cual es bastante. Imitemos lo que hace Japón, lo que hace Chile, que teniendo zonas de bastante situación sísmica, finalmente ellos saben controlar y los incidentes suelen ser menores», comentó el alcalde del distrito de Independencia, Ladislao Cruz Villachica.
El simulacro multipeligro de hoy es una oportunidad para reforzar la cultura de prevención y resiliencia ante desastres en el Perú, asegurando que las lecciones del pasado se traduzcan en una mejor preparación para el futuro.