Los trabajadores del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) cumplen su quinto día de huelga en demanda de mejoras salariales y condiciones laborales. Marlene Ferrer Reynaldo, representante de los huelguistas, afirmó que el gobierno se ha negado a dialogar con los dirigentes nacionales para buscar una solución a sus demandas.
En sus declaraciones, Ferrer expresó la frustración de los trabajadores, quienes llevan 14 años sin recibir aumentos salariales ni mejoras en sus condiciones laborales. «Nuestros dirigentes siguen negociando, pero hasta ahora no tenemos ninguna solución a nuestro pliego de reclamos», señaló.
La huelga, que comenzó de manera radical a nivel nacional, cuenta con la participación de 1500 trabajadores. «Estamos indignados. Son 14 años de olvido y de indiferencia por parte de nuestro jefe nacional. A pesar de ser una de las entidades más grandes que aportan al PBI, estamos después de la minería, aportando un 25% al PBI», afirmó Ferrer.
Ferrer detalló las precarias condiciones salariales de los trabajadores de Senasa, quienes ganan entre 800 y 1500 soles mensuales, sin haber recibido incrementos en 14 años. «En nuestro pliego de reclamos, una de las solicitudes inmediatas es el retiro del jefe nacional, cuya incapacidad nos ha llevado a esta situación», declaró.
La huelga ha tenido un impacto significativo a nivel nacional, con la paralización de la certificación de productos agroexportadores. «Hay contenedores que no están saliendo del Perú porque hemos cerrado el puerto marítimo y el puerto aéreo. Esta paralización está perjudicando tanto a nivel nacional como internacional», indicó Ferrer.
Impacto en la salud y la economía
La representante también advirtió sobre las posibles repercusiones en la salud de los consumidores, ya que los trabajadores de Senasa son responsables de la certificación de productos para garantizar su inocuidad. «Ahorita no estamos atendiendo. Todo está paralizado a nivel nacional, y hay grandes pérdidas. No es solo un problema nacional, sino internacional», explicó.
La huelga también afecta a sectores clave como la ganadería y la sanidad vegetal. Ferrer mencionó el incremento de la mosca de la fruta como un ejemplo de los problemas que podrían agravarse sin una pronta solución.
En un esfuerzo por continuar con su lucha, los trabajadores realizarán una vigilia hoy a las 6 de la tarde en la Plaza de Armas de Ancash. «Nosotros no vamos a retroceder en nuestra medida. Vamos a continuar hasta las últimas consecuencias. Hago un llamado al presidente regional de Ancash y a las diferentes autoridades para que se unan a nuestra causa», concluyó Ferrer.
La huelga de los trabajadores de Senasa resalta la urgente necesidad de atención a sus demandas por parte del gobierno. Tras 14 años de indiferencia, la situación requiere una pronta y efectiva solución para evitar mayores repercusiones en la salud pública y la economía nacional.