El 28 de agosto se llevó a cabo la segunda etapa de la Génesis Inka MTB, una de las competiciones de ciclismo de montaña más exigentes del país, con un recorrido que puso a prueba la resistencia y destreza de los participantes. La carrera comenzó en Chavín de Huántar y concluyó en el imponente Pastoruri, abarcando un desafiante trayecto de 81 kilómetros a lo largo de la majestuosa zona de los Conchucos y la Cordillera Blanca.
A las 6 a.m., los ciclistas iniciaron su travesía enfrentando terrenos irregulares y altitudes que superaron los 4,000 metros sobre el nivel del mar. A medida que avanzaban, atravesaron pintorescos pueblos como Pichiú Quinhuaragra, Pichiú San Pedro, Conin y Antamina, además de emblemáticos sitios naturales como las Huellas de Dinosaurio y el nevado Pastoruri.
Uno de los momentos más memorables de la jornada fue la acogida en Pichiú San Pedro. La comunidad local se volcó en apoyo a los ciclistas, creando un ambiente festivo que animó a los competidores a continuar su ardua travesía. La hospitalidad y el entusiasmo de los habitantes no solo contribuyeron al éxito del evento, sino que también reforzaron el espíritu de camaradería que caracteriza a esta competencia.
Aproximadamente al mediodía, los primeros ciclistas cruzaron la línea de meta en Pastoruri. Aldo Cotrina se llevó la victoria en esta etapa, seguido de cerca por el ecuatoriano Hugo Gómez y el huarmeyano John Purizaca, quienes demostraron una gran resistencia y habilidad en esta exigente jornada.
El éxito de esta etapa no solo resalta la dureza y belleza del evento, sino también el impacto positivo que tiene en las comunidades locales, que año tras año muestran su apoyo incondicional al deporte. La competencia continuará el 29 de agosto con una nueva etapa que llevará a los ciclistas desde Recuay hasta Aija, cubriendo un recorrido de 50 kilómetros que promete ser igualmente desafiante y emocionante.