Porfirio Cacha Macedo, vicepresidente de AGOEMA, ha manifestado su preocupación por los efectos del cambio climático en las montañas andinas, destacando cómo el retroceso de los glaciares está revelando los cuerpos de alpinistas que perecieron en accidentes años atrás. Uno de esos casos es el de César Hinostroza Gloria, un experimentado guía de montaña que murió sepultado por una avalancha en 1997 mientras protegía a su cliente.
El hallazgo
Los restos de Hinostroza fueron descubiertos recientemente debido al retroceso glaciar provocado por el calentamiento global. «Hace 27 años, César y su cliente fueron sepultados en el campo 2 tras alcanzar la cumbre. Una avalancha los sorprendió y, lamentablemente, ambos quedaron atrapados bajo la nieve», explicó Cacha Macedo. El guía había decidido quedarse una noche en la montaña para cuidar a su cliente, quien se encontraba exhausto tras la escalada.
El vicepresidente de AGOEMA también recordó con afecto a Hinostroza, a quien describió como un apasionado por la enseñanza y el montañismo. «Era un gran amigo y un excelente profesional. Siempre estaba dispuesto a compartir sus conocimientos con los más jóvenes. Su legado de valores y servicio a la comunidad montañera seguirá vivo», añadió.
Cambio climático y el deshielo
El fenómeno del cambio climático está acelerando el deshielo de los glaciares andinos, lo que no solo afecta el ecosistema, sino que también está exponiendo los cuerpos de montañistas que desaparecieron en accidentes o fueron sepultados por avalanchas en décadas pasadas. «Pronto podríamos ver más de estos tristes hallazgos, ya que muchos alpinistas fueron tragados por la montaña y ahora están siendo liberados por el retroceso glaciar», advirtió Cacha.
El vicepresidente también lamentó la falta de acción de las autoridades locales y nacionales ante la crisis climática y la desaparición de los nevados de la región.