Un voraz incendio forestal sigue avanzando en el sector San Vicente, en el distrito de Mancos, afectando a la comunidad durante horas. Las llamas, que se intensificaron en la tarde, han arrasado con varias hectáreas de vegetación, generando preocupación entre los habitantes locales. A pesar de los esfuerzos realizados por las brigadas conformadas por lugareños, la ubicación remota y el complicado acceso han dificultado las labores de contención, especialmente con la llegada de la noche.
La situación es crítica, ya que las condiciones nocturnas complican aún más el combate al fuego. Los vientos en la zona han contribuido a la rápida propagación del incendio, y la densa vegetación está siendo consumida a gran velocidad. Los brigadistas locales, sin apoyo especializado por el momento, están haciendo lo posible por contener las llamas utilizando herramientas rudimentarias y su conocimiento del terreno.
Los residentes cercanos, algunos de los cuales viven a escasa distancia del incendio, permanecen en alerta máxima y preparados para evacuar si la situación empeora. «Estamos muy preocupados, el fuego está cerca y no sabemos si podremos controlarlo», comentó un vecino del lugar, expresando el temor de la comunidad ante la creciente amenaza.
Las autoridades locales han sido notificadas y se espera que, en las próximas horas, lleguen refuerzos de brigadas especializadas en incendios forestales para sumarse a los esfuerzos de control. Por ahora, la prioridad es evitar que las llamas lleguen a las zonas habitadas y evitar una mayor devastación del ecosistema local, que ya ha sido gravemente afectado por la pérdida de fauna y flora.
Se espera que con la llegada del amanecer, las condiciones mejoren y los equipos de respuesta puedan evaluar los daños causados hasta el momento, así como redoblar los esfuerzos para finalmente controlar el siniestro. Mientras tanto, los vecinos de San Vicente y Mancos esperan, preocupados, que el fuego no siga avanzando.