La Oficina de Gestión de Riesgos ha reforzado su almacén de ayuda humanitaria en preparación para la temporada de lluvias, que suele generar emergencias entre los meses de octubre y marzo, con mayor incidencia entre enero y marzo. El plan de contingencia del distrito incluye una serie de medidas para reducir los riesgos y asegurar la atención rápida a las familias damnificadas o afectadas por desastres.
Implementación de bienes y recursos
El almacén de ayuda humanitaria se ha abastecido con los cinco componentes principales para atender emergencias. Entre los artículos disponibles se encuentran:
- Techo y refugio: calaminas y carpas para proteger a las familias cuyas viviendas resulten dañadas.
- Abrigo: colchas, camas, colchones y kits de abrigo personal para garantizar la protección ante el frío.
- Alimentos: productos básicos como arroz, azúcar, fideos, menestras y aceites.
- Herramientas: implementos como carretillas, picos, lampas y machetes, necesarios para las labores comunales durante emergencias.
- Enseres: kits de utensilios de cocina, incluidos cucharas, platos y tenedores, que serán entregados tras la evaluación de daños.
La entrega de estos bienes se realizará de acuerdo a la evaluación de daños y análisis de necesidades, priorizando a las familias que hayan perdido todo a causa de las emergencias.
Acciones preventivas y reducción de riesgos
Además de la preparación para la atención de emergencias, la Oficina de Gestión de Riesgos está trabajando con los vecinos en la limpieza y descolmatación de puntos críticos, como el río Aurores y pequeñas quebradas del distrito. Estas intervenciones buscan reducir los riesgos asociados a las lluvias, evitando que los desmontes y residuos colmaten las vías fluviales.
La implementación del plan de preparación y la gestión de los recursos disponibles buscan garantizar una respuesta eficiente ante posibles desastres, protegiendo a la comunidad y minimizando los impactos durante la temporada de lluvias.