El Gobierno Regional de Áncash ha retomado los trabajos del local de contingencia del colegio Micelino Sandoval Torres en Caraz, luego de superar una serie de observaciones. Así lo informó el gerente regional de Infraestructura, Arq. Gustavo De La Cruz Dueñas, quien destacó que la obra se reinició tras gestionar un adicional presupuestario que permitirá mejorar los espacios educativos.
«Este reinicio es un gran alivio para la comunidad y esperamos que sea definitivo,» señaló De La Cruz. Según el funcionario, la suspensión de los trabajos había generado preocupación tanto en la comunidad educativa como en las autoridades regionales, incluido el gobernador de Áncash. «Estamos haciendo todos los esfuerzos técnicos y de gestión para que no se paralice nuevamente la obra,» agregó.
Modificaciones para mayor seguridad y confort
Uno de los puntos clave en la reactivación del proyecto fue el cambio de materiales que inicialmente no ofrecían las condiciones adecuadas para el clima ni para la seguridad de los estudiantes. «El proyecto original contemplaba una cubierta ligera y traslúcida, además de paredes de madera machihembrada en una sola cara, lo que dejaba expuestas las instalaciones eléctricas y representaba un riesgo,» explicó el arquitecto.
En función de ese análisis, se decidió implementar una cubierta termoacústica que ofrecerá mayor protección ante las inclemencias del clima. Asimismo, se colocará cielo raso para mejorar el aislamiento y se reemplazaron los cerramientos de madera por paneles de fibrocemento en ambas caras, lo que incrementará la seguridad y reducirá riesgos para los estudiantes.
Evaluación del avance y proyección de la obra
Si bien la obra ha sido reiniciada, aún no se ha precisado el porcentaje exacto de avance. «Estamos evaluando el progreso y esperamos tener un análisis concreto la próxima semana,» informó De La Cruz. La empresa a cargo ha sido instruida para agilizar los requerimientos y evitar futuros retrasos.
El gerente regional finalizó expresando optimismo sobre el reinicio de la obra, indicando que la comunidad de Caraz puede estar tranquila, ya que el compromiso es culminar este proyecto sin nuevas interrupciones, asegurando un espacio educativo más confortable y seguro para los estudiantes.