El Director de la Dirección Desconcentrada de Cultura de Áncash, Ruy Escobar Gamboa, anunció que el Museo Nacional de Chavín cerrará temporalmente sus puertas desde el 12 de noviembre hasta el 1 de diciembre para realizar trabajos de mantenimiento. Escobar Gamboa explicó que estas labores buscan mejorar las instalaciones internas del museo, especialmente en áreas de iluminación, techos y sistemas eléctricos, con el objetivo de garantizar la seguridad de los visitantes y la preservación del patrimonio cultural.
“El trabajo de mantenimiento es necesario para evitar cualquier tipo de incidente que pueda afectar a los visitantes y asegurar la continuidad de los servicios del museo”, señaló Escobar. La reapertura está programada para el 2 de diciembre, una vez que culminen las intervenciones al interior del museo, financiadas con recursos del Ministerio de Cultura.
Riesgos para el Monumento de Chavín: deslizamientos en Nunupata
Escobar Gamboa también expresó su preocupación por los riesgos de deslizamientos en la quebrada Nunupata, que amenazan tanto al complejo arqueológico de Chavín como a la comunidad local. Según el director, el Ministerio de Cultura ha promovido mesas técnicas desde el año pasado, involucrando a autoridades locales y organismos técnicos en un esfuerzo por mitigar el peligro a través de la reforestación y el cambio de cultivos en la zona.
“Nos encontramos en una situación de alto riesgo, y ante la posibilidad de un fenómeno de El Niño fuerte, el riesgo de embalsamiento en la zona de Nunupata podría poner en peligro tanto a la población de Chavín como al Patrimonio Mundial”, advirtió Escobar. En la década de 1940, un embalsamiento afectó gravemente el área y sumergió parte del sitio arqueológico, por lo que el director subrayó la importancia de trabajar en la prevención.
La Municipalidad Distrital de Chavín ha solicitado apoyo de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) para contar con una normativa que permita realizar intervenciones preventivas. Además, la Dirección de Cultura de Áncash impulsa la reubicación de pobladores en zonas de alto riesgo, al tiempo que promueve la implementación de las recomendaciones técnicas para proteger el sitio arqueológico y las vidas en el área.