Valentina Pérez, una talentosa niña de 11 años nacida en Huaraz, ha demostrado desde muy pequeña su inclinación hacia la danza y la gimnasia. Desde los 6 años, Valentina ha dedicado su tiempo al ballet y la gimnasia, disciplinas que han moldeado su carácter y han cultivado su pasión por el arte del movimiento. Su dedicación la ha llevado a destacarse en ambas actividades, convirtiéndose en un referente del talento huaracino.
Logros en competencias de alto rendimiento
Hace apenas seis meses, Valentina fue convocada para entrenar en Alto Rendimiento en la Videna, la principal instalación deportiva de Huaraz. Su esfuerzo y disciplina se tradujeron en una destacada participación en un campeonato organizado por la Confederación Sudamericana de Gimnasia. En esta competencia, Valentina dejó huella al obtener dos medallas de oro y plata.
Éxitos en la capital
Desde marzo, Valentina se trasladó a Lima gracias a una invitación de la Federación Deportiva Peruana de Gimnasia. En la capital, se ha preparado arduamente para cumplir con los estándares de clasificación. Este año, fue parte de la Copa Federación que se llevó a cabo en la Videna, donde logró una medalla de oro – en piso y una medalla de plata – en salto. Además, se destacó en un control interno en varios aparatos, lo que le aseguró su clasificación para el evento internacional.
La gimnasia artística, la disciplina que Valentina practica, involucra cuatro aparatos: viga de equilibrio, salto, barras y piso. Actualmente, se encuentra entrenando en el nivel CONSUGI nivel 2, preparando su cuerpo y mente para los retos.
Este destacado desempeño le permitió posicionarse entre las mejores gimnastas de su categoría a nivel nacional. De hecho, sigue preparándose para representar al Perú en la próxima competencia de la Confederación de Gimnasias que se realizará en Paraguay del 25 de noviembre al 1 de diciembre. Valentina competirá en la categoría de 11 a 12 años, y su participación está generando un grandes espectativas.
Apoyo familiar y esfuerzo personal
El apoyo constante de sus padres ha sido fundamental en el desarrollo de Valentina. Ellos la motivan diariamente en su búsqueda por alcanzar sus objetivos en el deporte y el arte. Acompañan a su hija en cada paso de su carrera, desde sus primeros entrenamientos hasta sus competiciones más importantes.
Futuro prometedor
A pesar de que la federación deportiva brinda apoyo económico a partir de los 15 años, Valentina ha tenido que subencionar sus gastos hasta ahora, lo que representa un desafío adicional en su camino. Sin embargo, su determinación y el respaldo de su familia son factores que la impulsan a seguir adelante en su carrera como gimnasta y bailarina, consolidando así su lugar como una de las más grandes promesas del talento huaracino.
La historia de Valentina Pérez no solo es un testimonio del espíritu luchador de una niña que aspira a lograr sus sueños, sino también una fuente de inspiración para otros jóvenes talentos en Huaraz y Áncash.