La reciente designación del nuevo director en la Dirección Regional de Educación de Áncash ha generado un resurgir de esperanzas en el ámbito educativo regional. Máximo del Castillo Ayala, ex presidente de la Asociación de Ex Directores de Instituciones Educativas (II.EE), ha expresado su saludo ante este cambio y ha enfatizado la necesidad de otorgar autonomía al nuevo responsable para que pueda designar a sus funcionarios de confianza.
Críticas al continuismo en la gestión educativa
Del Castillo Ayala ha manifestado su preocupación por el continuismo negativo que ha caracterizado a la gestión educativa en los últimos años. Según su análisis, el sector ha sufrido las consecuencias de decisiones poco acertadas y de la permanencia de autoridades que no han sabido responder a las necesidades del sistema.
“Hemos visto cómo se han devuelto a directores que no deberían estar en sus cargos, lo cual no se puede permitir en el ámbito educativo”, afirmó el ex presidente.
Necesidad de un cambio real
La gestión educativa debe ser reestructurada de manera urgente, con un enfoque en la formación de un equipo técnico que no se encuentre influenciado por intereses políticos.
“Es esencial contar con profesionales que comprendan la realidad educativa de nuestra región y que puedan tomar decisiones claras y precisas”, señaló. Enfatizándo que la educación no puede ser politizada y que los nuevos responsables deben enfocarse en los resultados y en el bienestar de los estudiantes.
Expectativas para la nueva gestión
Con la llegada del nuevo director, se espera que se implementen cambios significativos en la gestión educativa; destacado la importancia de que el nuevo responsable, quien cuenta con experiencia previa como alcalde, pueda aplicar su conocimiento y habilidades en este nuevo rol.
«Es fundamental que este liderazgo se traduzca en una mejora real para nuestros niños y jóvenes, quienes merecen un sistema educativo de calidad», concluyó.
La expectativa es que el nuevo director trabaje en conjunto con un equipo técnico comprometido, capaz de enfrentar las irregularidades y aportar a un sistema educativo más justo y eficiente.