En un encuentro reciente entre autoridades regionales, se abordó el creciente riesgo que enfrenta la Laguna Parón. Se informó que los niveles de agua de la laguna han superado las cuotas de seguridad, lo que ha generado preocupación entre los actores locales y los residentes.
Según los informes, la situación se ha intensificado debido al aumento de la cuota de agua, producto de las lluvias, lo que ha incrementado el riesgo para la población y las áreas circundantes. Se tuvo la participación de la mayoría de los invitados a la reunión.
En la reunión, se acordó realizar un monitoreo constante de la situación, así como coordinar futuras reuniones en Caraz, con la participación de las autoridades locales y representantes de la comunidad.
Asimismo, las autoridades enfatizaron la importancia de seguir evaluando la situación y de mantener una comunicación constante entre los diferentes actores involucrados. A pesar de las dificultades, se mostró el compromiso de continuar con el monitoreo y las gestiones necesarias para abordar este problema, con la esperanza de que las acciones tomadas contribuyan a una solución efectiva a largo plazo.
El próximo encuentro, aunque aún sin fecha definida, buscará dar continuidad a los acuerdos y facilitar el trabajo conjunto entre todos los sectores.

