La prefecta de Áncash, Pamela Serafín, informó que se está llevando a cabo un monitoreo en las instituciones educativas de la región con el objetivo de verificar el estado de su infraestructura antes del inicio del año escolar. En coordinación con autoridades municipales y la UGEL, se busca identificar las condiciones en las que recibirán a los estudiantes y tomar medidas correctivas ante posibles riesgos.
Además, en diversas zonas de la región se han reportado emergencias debido a las lluvias intensas, como activación de quebradas, huaicos y pérdida de plataformas viales. Uno de los casos más críticos se presenta en la zona de Sihuas, donde anexos han quedado aislados. Sin embargo, existe una vía alterna que también será evaluada para garantizar el tránsito de los pobladores.
Por otro lado, en respuesta a la creciente preocupación por el incremento del caudal del río Santa, se ha dispuesto la intervención con maquinaria pesada de la Autoridad Nacional del Agua (ANA) en la zona costera de Áncash. Se han iniciado trabajos preventivos para mitigar riesgos y evitar desbordes que podrían afectar a la población y la infraestructura.
Las autoridades han enfatizado la necesidad de reforzar las acciones preventivas y la sensibilización de las municipalidades locales. Se hace un llamado a no esperar la temporada de lluvias para actuar, sino a fortalecer la planificación y respuesta inmediata ante los efectos climáticos que afectan a la región.