La Oficina de Disciplina de la Región Policial de Áncash informó que los casos de policías sancionados por deudas impagas y conducción en estado de ebriedad siguen en aumento. Según el inspector encargado, actualmente hay 20 procesos abiertos por deudas del año pasado y 10 más en lo que va del año, lo que muestra una tendencia creciente en estas faltas.
El inspector exhortó a los agentes a cumplir con sus obligaciones financieras, recordando que el incumplimiento no solo afecta su imagen personal, sino también la del cuerpo policial en su conjunto. A pesar de los llamados de atención, se siguen registrando numerosos casos en los que efectivos policiales incumplen con sus pagos, lo que genera quejas y denuncias formales en su contra.
Además, se advirtió que la conducción en estado de ebriedad se ha convertido en otra de las principales faltas disciplinarias dentro de la institución. Junto con el abandono de servicio y la desatención a sus funciones, estos casos han sido considerados infracciones graves dentro del régimen disciplinario de la Policía Nacional del Perú.
Las sanciones aplicadas van desde amonestaciones hasta suspensiones, dependiendo de la reincidencia y la gravedad de la falta. En caso de conductas reiteradas, los efectivos pueden ser sometidos a procesos más severos que podrían terminar en su separación de la institución. La Policía Nacional reafirmó su compromiso con la disciplina y el respeto a la ley, enfatizando que los agentes deben ser ejemplo para la ciudadanía.