El Sagrario San Sebastián fue el escenario principal de la solemne Misa Crismal, una de las celebraciones más significativas del calendario litúrgico católico, donde sacerdotes de la Diócesis de Huaraz renovaron públicamente su compromiso de servicio, humildad y fe ante Dios y la comunidad.
Presidida por el Obispo José Alarcón, la ceremonia se realizó en el marco de la Semana Santa y estuvo marcada por un profundo sentido espiritual y pastoral. Durante la misa, el prelado bendijo y consagró los santos óleos que serán utilizados durante todo el año en los sacramentos del bautismo, confirmación, unción de los enfermos y orden sacerdotal.
Además de los párrocos de las distintas parroquias de la diócesis, participaron autoridades locales y numerosos fieles, quienes acompañaron con recogimiento y devoción este momento de unidad eclesial.
El obispo destacó en su homilía la importancia de mantener viva la comunión entre los presbíteros y el pueblo de Dios, reafirmando el llamado a una Iglesia cercana, sencilla y comprometida con las necesidades espirituales de sus comunidades.

