En una visita técnica realizada a las obras de la Plazuela de La Soledad, el decano del Colegio de Ingenieros de Áncash, acompañado de su equipo, recomendó con urgencia que tanto el contratista como la supervisión de la obra contraten un arquitecto, debido a la naturaleza arquitectónica del proyecto.
“El expediente técnico no contempla un arquitecto como especialista, lo cual es fundamental para garantizar la calidad del diseño y la ejecución de una obra como esta”, indicó el decano, quien además precisó que esta recomendación ya fue comunicada oficialmente a los responsables del proyecto.
Durante la inspección también se verificaron observaciones menores, propias de la etapa inicial de la obra. Se detectó que algunos elementos estructurales como el cemento usado en la cimentación estaban dentro de los estándares, aunque con fecha de vencimiento cercana, por lo que se pidió mayor control en el almacenamiento. Asimismo, se revisaron planos que mostraban deficiencias en el sistema de drenaje, las cuales deben ser corregidas en la etapa de ejecución.
A la fecha, el avance físico de la obra no supera el 10 %, según estimaciones del equipo técnico. Sin embargo, se destacó que el uso de una mejor dosificación de materiales en esta etapa inicial representa un avance en la calidad de ejecución respecto al inicio de los trabajos.
El Colegio de Ingenieros reiteró que la incorporación de un arquitecto será clave para preservar el valor patrimonial y estético de la Plazuela de La Soledad.