La comunidad del distrito de Cochapetí, en la provincia de Huarmey, denunció el robo de varios objetos litúrgicos del templo Santiago Apóstol, ubicado en esta localidad altoandina de Áncash. El hecho ha sido calificado por representantes religiosos como un atentado contra el patrimonio y la fe del pueblo.
Según informó el Santuario Mariano Nuestra Señora del Rosario de Huarmey, los objetos sustraídos incluyen una custodia, un crucifijo de plata y la corona de la Virgen Dolorosa, elementos considerados sagrados por la comunidad católica local.
El hecho fue difundido a través de un pronunciamiento público en redes sociales, donde se señaló que este tipo de actos “no solo constituyen un delito contra la propiedad, sino también una grave ofensa a la fe del pueblo de Dios”.
Tras la denuncia, la Policía Nacional del Perú ha iniciado las diligencias correspondientes para identificar a los presuntos responsables. Hasta el momento, no se ha confirmado si el templo fue forzado ni se ha informado sobre personas intervenidas.
La comunidad religiosa exhortó a los fieles y vecinos de la zona a colaborar con cualquier información que permita avanzar en las investigaciones. Asimismo, hicieron un llamado al respeto por los lugares sagrados y pidieron unión en oración y vigilancia comunitaria.
De acuerdo con el pronunciamiento, los bienes sustraídos estaban destinados exclusivamente al culto y a la oración. “Este atentado no puede quedar en silencio ni en la impunidad”, se lee en el comunicado oficial del santuario.

