El secretario general del sindicato de trabajadores de la Corte Superior de Justicia de Áncash, Moisés Giraldo, denunció que una trabajadora bajo régimen CAS (Contrato Administrativo de Servicios) fue presuntamente presionada por una jueza superior supernumeraria para que proporcionara datos de un proceso vinculado a Keiko Fujimori y el abogado Galarreta, sin que el expediente estuviera a su cargo ni tuviera relación directa con el abogado en cuestión.
La trabajadora acudió al sindicato temerosa por su estabilidad laboral, ya que el régimen CAS no otorga estabilidad ni nombramiento permanente, y se basa en renovaciones contractuales sujetas a decisión institucional. “Ese tipo de contratos generan vulnerabilidad. Por eso acompañamos a nuestra agremiada en su denuncia ante la Oficina Desconcentrada de Control (ODAN)”, afirmó Giraldo.
Según el dirigente sindical, existen mensajes de WhatsApp, llamadas insistentes y coordinaciones con terceros que demostrarían el intento de influir en la trabajadora. La presión habría continuado incluso tras la negativa de brindar la información, con frases como: “Gracias por atender al abogado, lo tendré muy en cuenta”, enviadas por la magistrada. “Esto es un acto intimidatorio y no lo vamos a permitir”, agregó.
Según Giraldo, el caso ya se encuentra en investigación. El sindicato anunció que enviará un informe al presidente de la Corte Superior de Justicia de Áncash y solicitará medidas ejemplares. “Caiga quien caiga, no vamos a tolerar ningún acto que vulnere los principios de transparencia dentro del Poder Judicial”, advirtió Giraldo.