El director regional de salud de Áncash, Ricardo Natividad, informó que Saki Terada, la montañista japonesa rescatada en el nevado Huascarán, se encuentra internada y evoluciona favorablemente, luego de haber presentado complicaciones severas producto de la altitud, el frío extremo y el esfuerzo físico prolongado.
El diagnóstico médico incluye un cuadro de hipotermia moderada, que ya ha sido controlado, y mal de altura con signos de edema cerebral, condición que fue atendida de manera oportuna y muestra actualmente una buena evolución.
También se reportaron lesiones en extremidades; una afectación en el dedo de una mano y otra en un pie, que estarían relacionadas con una isquemia leve, es decir, una falta temporal de circulación sanguínea, la cual está siendo tratada y muestra signos de mejora.
Uno de los diagnósticos más delicados fue la presencia de rabdomiólisis, una inflamación muscular generada por el esfuerzo extremo y la exposición prolongada al frío. Esta condición, que puede comprometer la función renal, ha sido estabilizada gracias a la intervención médica especializada.
La paciente se encuentra lúcida, consciente y con quemaduras solares leves en el rostro. No obstante, los especialistas están evaluando la posibilidad de derivarla a una cámara hiperbárica en una entidad privada como parte de su proceso de recuperación.
Según el director de salud, Terada permanecerá en Huaraz algunos días más para continuar con su tratamiento y aclimatarse antes de ser trasladada a Lima. Además, representantes de la embajada de Japón en Perú se mantienen en constante comunicación con el equipo médico y brindan el apoyo necesario a su compatriota.