El presidente del Consejo Regional de Turismo de Áncash, Francisco Romero, expresó su preocupación por el crecimiento del turismo informal en la región y alertó sobre las consecuencias negativas para la seguridad de los visitantes y la imagen del destino.
“Queremos operativos reales. Hay pseudoguías y agencias clandestinas que dañan la imagen del turismo en Áncash. A ellos hay que fiscalizar”, señaló el representante, al pedir mayor acción por parte de las autoridades competentes, especialmente en zonas como Santa Cruz y la Cordillera Huayhuash.
Romero también llamó la atención sobre los problemas que enfrentan los operadores formales, quienes —según indicó— son constantemente fiscalizados, mientras que el sector informal crece sin control. “Los operativos están concentrados en los hoteles formales, pero no se hace nada en los espacios donde realmente hay informalidad”, apuntó.
Por otro lado, el titular del consejo lamentó el mal estado de la carretera Huaraz–Chavín de Huántar, uno de los tramos más importantes para el turismo del Callejón de Conchucos. Según dijo, los viajeros tardan hasta cuatro horas y media en recorrer una vía plagada de zanjas y huecos.
“Da vergüenza la ruta. Los buses que llegan desde Lima lo hacen con hasta doce horas de retraso. Hay una pésima coordinación en los cierres de vía”, declaró.
Asimismo, adelantó que se iniciarán trabajos de mantenimiento en los accesos a las quebradas Rajucolta y Shallap, lo que permitirá diversificar la oferta turística en Huaraz.
Finalmente, hizo un llamado a respetar las normas vigentes en espacios naturales protegidos como Parón y Pastoruri. “Nos guste o no, hay normas que debemos cumplir para proteger nuestros recursos. El problema es la falta de control sobre los ingresos informales que continúan afectando nuestra región”, puntualizó Romero.

