Reactivan obras en cinco hospitales de Áncash tras financiamiento temporal
Un acuerdo entre ANIN y el Gobierno Regional permitirá que se retomen de inmediato los trabajos en los hospitales de Recuay, Casma, Pomabamba, San Nicolás y Huaylas, después de paralizaciones prolongadas que dejaron la salud regional en situación crítica.
En las últimas semanas, la paralización de cinco proyectos hospitalarios en Áncash evidenció una preocupante falta de coordinación interinstitucional, que está afectando la atención de pacientes en provincias como Huari, Huarmey o Caraz, donde los servicios actuales enfrentan sobrecarga, falta de equipos y personal, según denunció la Diresa
Para evitar mayores retrasos y responder a esta crisis sanitaria, ANIN y el Gobierno Regional de Áncash acordaron un financiamiento temporal que permitirá reiniciar las obras de los hospitales ubicados en Recuay, Casma, Pomabamba, San Nicolás y Huaylas.
El anuncio fue hecho en Huaraz por el jefe de ANIN, Hernán Yaipén, quien señaló que, ante la ausencia de una asignación presupuestal definitiva, se financió de forma extraordinaria el avance de estas infraestructuras. El gerente general del Gobierno Regional, Marco La Rosa Sánchez Paredes, enfatizó que se trata de una respuesta rápida a una solicitud planteada desde las bases, en una región donde la demanda de atención médica es alta y la infraestructura escasa.
La paralización del hospital de Pomabamba, por ejemplo, había sido una preocupación recurrente: tras más de 18 meses detenida por fallas estructurales graves y observaciones de la Contraloría –incluyendo fisuras en losas y deformaciones en aislantes sísmicos–, el proyecto apenas proyectaba volver a avanzar. En Recuay, según las autoridades locales, se esperaba que la culminación del nuevo hospital para mediados de 2025 fuera un aliciente luego de enfrentarse a conflictos laborales y bloqueos.
La inyección de recursos extraordinarios busca evitar que esta misma situación se repita y permitir que las obras continúen sin interrupciones. Estos centros hospitalarios son vistos como “un clamor de la población”, según líderes locales, que esperan contar pronto con una infraestructura moderna y la atención médica que actualmente solo reciben en condiciones precarias.