El director regional de Energía y Minas, Ricardo Castillejo Melgarejo, informó que tras una inspección en Yaután (Casma) se encontraron pasivos ambientales de la ex minera «La Esperanza» en la cabecera de la cuenca. Advirtió que, aunque en la temporada seca el agua tiene poco movimiento, con la llegada de las lluvias los materiales contaminantes podrían arrastrarse al río Yaután, generando riesgo de metales pesados en el agua.
De igual forma, en Marca (Recuay) un equipo técnico, a solicitud de la comunidad, detectó bocaminas y desmonteras abandonadas que corresponderían a actividades recientes. “Lo preocupante es que los mineros no están remediando. Esto será comunicado a la Dirección de Formalización Minera, porque ese pasivo debe quedar cerrado. El proceso obliga a un cierre responsable al titular inscrito en el Reinfo; si se trata de actividad ilegal, la Fiscalía debe intervenir”, señaló Castillejo.
Las autoridades reiteraron que estos hallazgos representan un riesgo ambiental y sanitario, pues la contaminación podría extenderse a las cuencas y afectar tanto la calidad del agua como la agricultura local. Ante ello, la Dirección Regional de Energía y Minas anunció que continuará con las inspecciones y derivará los casos correspondientes a las instancias competentes.