La figura penal aplicada al caso de Heydi Macedo Ballico cambió de homicidio simple a feminicidio, lo que abre un nuevo camino para que la justicia aplique criterios más rigurosos frente a la violencia de género. El abogado de la familia, Ronald Araujo, confirmó que la modificación fue oficializada tras una resolución judicial que devolvió el expediente al fiscal para su reformulación bajo el artículo 108-B del Código Penal.
El cambio se produjo luego de que el juez del Tercer Juzgado Penal Unipersonal de Huaraz determinara que los hechos denunciados tenían los elementos estructurales de un feminicidio —por la condición de mujer de la víctima y la naturaleza de los hechos— y no solo de un homicidio común. Según reportes, este paso implica que el proceso se derive a una fiscalía especializada en violencia de género, lo que modificará la instancia procesal y potencialmente la severidad de la pena.
Qué ocurrió y cómo avanzó la investigación
La víctima, Heydi Macedo Ballico (20 años), desapareció el 31 de diciembre de 2022 en Huaraz, región Áncash. La acusación original presentada en enero de 2024 estableció el delito de homicidio simple, con pena solicitada de 10 años y 8 meses para el principal imputado.
Sin embargo, durante el juicio oral se advirtió que los hechos correspondían más a feminicidio: una joven vulnerada por razón de género. Un juez penal devolvió el expediente al fiscal para su reformulación bajo el artículo 108‑B del Código Penal que sanciona feminicidio.
El cuerpo de Heydi aún no ha sido hallado con certeza, lo que complica la investigación, pero ya existen líneas de investigación sobre desaparición, trata y violencia contra la mujer.
Qué significa el cambio de homicidio a feminicidio
La reclasificación a feminicidio marca un avance importante en el reconocimiento del carácter de violencia de género en este caso. Este cambio modifica la pena prevista, el enfoque de la investigación y el tratamiento judicial del expediente, pudiendo implicar hasta 30 años de prisión para los responsables si se mantiene la tipificación.
Para la comunidad de Huaraz y de toda Áncash, el caso se convierte en un referente de la exigencia de justicia para mujeres víctimas de violencia. La evolución del proceso es seguida de cerca por la sociedad civil, que espera que la violencia de género sea sancionada con la severidad que requiere la ley.
Qué sigue en el trámite legal
Ahora el caso debe pasar a una fiscalía especializada en violencia de género y programarse una nueva fecha de juicio oral bajo la nueva tipificación. La destreza del litigio, la celeridad procesal y el respeto al principio de debida diligencia serán fundamentales para que no se diluya la causa.
La familia de Heydi mantiene su expectativa de que esta modificación permita “hacer justicia” y no quede en otro expediente detenido. La ciudadanía también permanece atenta: cada avance marcará un precedente para casos similares en la región.