El jefe de la Dirección Ejecutiva de Salud Ambiental (Desa), Gerardo Norabuena, informó que se encuentran en proceso las pruebas de laboratorio para determinar la calidad del agua que consume la población de Huanchac, luego de que se reportaran indicios de contaminación. Según explicó, los primeros análisis preliminares realizados por la EPS detectaron la presencia de aluminio y, posiblemente, hierro, lo que motivó una alerta preventiva.
Norabuena indicó que el último monitoreo se realizó el viernes en los puntos de captación ubicados en la parte alta de la zona. Los resultados oficiales serán entregados por el laboratorio en un plazo de 12 días, lo que permitirá confirmar si existen metales en niveles no aptos para consumo humano. “En función a eso, si hay presencia de metales, tendrá que buscarse otra fuente o evaluar la instalación de una planta de tratamiento”, señaló.
El funcionario explicó que implementar una planta de ósmosis inversa sería una alternativa, pero de alto costo, lo que dificultaría su sostenibilidad para la población. Por ello, entre las principales recomendaciones figura identificar una nueva fuente de captación que permita garantizar agua sin presencia de metales.
Mientras se esperan los resultados definitivos, la municipalidad dispuso medidas de contingencia, entre ellas el abastecimiento de agua mediante cisternas y la entrega de bidones a los vecinos. Norabuena precisó que el agua de la red no debe consumirse de manera directa, aunque puede utilizarse para labores domésticas como lavado de ropa.
Finalmente, señaló que realizar este tipo de monitoreos requiere presupuesto asignado por el Ministerio de Economía y Finanzas, por lo que su sector continuará realizando el seguimiento correspondiente para asegurar que el agua distribuida sea apta para consumo humano.

