Durante la reciente emisión del programa “Ahora es Noticia” se comentó una propuesta que viene circulando en los espacios carnavaleros sobre la clasificación de los barrios del Carnaval Huaracino en dos categorías, A y B, basada en los puntajes acumulados en los últimos tres años de competencia.
Según lo expuesto en el programa, esta tabla ubicaría en la categoría A a los barrios que han obtenido los puntajes más altos, mientras que aquellos con resultados menores o con participación reciente figurarían en la categoría B. La información ha motivado comentarios y debate entre participantes y vecinos.
Una propuesta basada en desempeño reciente
En el análisis del programa se explicó que la clasificación se construye a partir de una sumatoria de puntajes de las ediciones pasadas del carnaval.
Esta organización permitiría ordenar a los barrios según su desempeño histórico reciente, lo que para algunos actores serviría como referencia para la coordinación interna de las actividades carnavaleras.
Sin embargo, durante la conversación se precisó que la propuesta forma parte de lo que se comenta en los entornos cercanos al carnaval y que aún requiere una comunicación clara y formal por parte del Patronato.
Presupuestos y orden de participación, temas que generan discusión
En el programa se mencionó que esta posible clasificación tendría relación con los apoyos económicos que las municipalidades entregan a cada barrio, así como con la programación del desfile y otras actividades.
La idea parte de experiencias en las que algunos barrios recibieron apoyo, pero su presentación final no reflejó el nivel de inversión esperado, lo que impulsó discusiones internas sobre criterios más transparentes o vinculados al trabajo realizado.
El tema generó reacciones en redes, especialmente respecto a cómo podrían verse afectados los barrios de menor tamaño, cuya participación depende de actividades pro fondos y del apoyo vecinal.
Realidades distintas entre barrios y el reto de equilibrar participación
Durante el programa se recordó que el carnaval reúne realidades muy diversas.
Hay barrios con estructuras consolidadas, comparsas grandes y mayor capacidad para financiarse, mientras que otros dependen directamente del aporte vecinal y de actividades que realizan durante el año.
Esta diferencia alimentó el debate sobre si una clasificación ayudaría a ordenar, o si podría profundizar las brechas entre barrios con más recursos y aquellos con menos posibilidades.
El rol del Patronato y la importancia de la fiscalización
Otro punto abordado en la conversación fue la necesidad de mejorar los mecanismos de seguimiento al uso de los insumos y presupuestos asignados.
En el programa se comentó que, en años anteriores, algunos barrios recibieron materiales o recursos que luego no se reflejaron claramente en sus presentaciones, lo que generó cuestionamientos internos.
Se señaló que el Patronato podría fortalecer su labor de acompañamiento y supervisión, especialmente para garantizar que el apoyo llegue al objetivo: mantener y mejorar la calidad del carnaval.
El carnaval sigue siendo una construcción de los barrios
El programa enfatizó que el Carnaval Huaracino existe gracias al trabajo de los barrios y que cualquier propuesta de reorganización debería considerar su participación, esfuerzo y capacidad organizativa.
Las conversaciones en torno a la posible clasificación reflejan el interés de que la fiesta continúe creciendo y que las decisiones se tomen con diálogo y claridad.

