Carla Torres Sigueñas, coordinadora del Eje 3 del Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, informó que únicamente siete gobiernos locales de Áncash cumplieron de manera óptima las metas vinculadas a la mejora de la calidad del agua para su población. La funcionaria alertó que los municipios con bajo desempeño podrían perder presupuesto el próximo año.
Torres explicó que el Programa Nacional de Saneamiento Rural (PNSR) realizó un taller de capacitación dirigido a las autoridades que recibieron fondos en 2024 para la compra de insumos de cloración y la mejora del servicio de agua potable en zonas rurales. El objetivo fue presentar los resultados de la evaluación anual y reforzar los procesos de gestión.
Sin embargo, ningún alcalde asistió al evento, pese a haber sido convocados. “Es importante que las autoridades locales se involucren directamente en la implementación de estas actividades. Su ausencia afecta el cumplimiento de metas que están orientadas a garantizar agua segura a la población rural”, señaló.
Resultados poco alentadores en Áncash
Según la evaluación del PNSR, solo siete municipalidades de Áncash lograron un buen desempeño en oportunidad, actualización del aplicativo DATAS y cumplimiento de la finalidad pública: Mato, Cajay, Ponto, San Juan, Conchucos, Llana y Cochabamba.
El resto de gobiernos locales obtuvo un desempeño regular, principalmente por incumplimientos en el indicador de oportunidad. “Cumplen, pero no de manera oportuna, y eso les impide alcanzar un buen desempeño”, detalló Torres.
Consecuencias por bajo desempeño
La coordinadora advirtió que los municipios que no lograron resultados satisfactorios podrían quedar excluidos de las próximas transferencias presupuestales. “Esta evaluación no es solo para informar. Los gobiernos con bajo desempeño no serán considerados en futuras asignaciones de recursos”, afirmó.
Torres recordó que la cloración del agua es esencial para prevenir enfermedades y mejorar la salud de la población rural, especialmente en zonas donde los índices de anemia aún son altos.
La ausencia de autoridades locales y el bajo nivel de ejecución en varios municipios evidencian, según la funcionaria, una brecha preocupante en la gestión del servicio de agua potable en Áncash, un problema que podría profundizarse si no se corrigen oportunamente estos indicadores.