Si hubiera que enumerar los aspectos fundamentales para determinar lo bueno que es un vídeo, seguramente el primer lugar sería el contenido; un vídeo puede tener una gran producción, pero si el contenido es malo, todo el vídeo lo será.
Todos los productores de éxito empezaron haciendo vídeos sencillos, sin mucha calidad y técnica, pero las cosas crecen cuando hay pasión y dedicación.
Para aquellos que ya han dado ese primer paso de empezar con lo que tienen, aquí hay algunos consejos sobre cómo dar el siguiente paso, aprendiendo un poco sobre el equipo esencial en un rodaje más profesional.
Continúa la lectura para saber más. 🙂
1) Cámaras y objetivos
Primero explicando el título de este tema: los objetivos son lo que las personas llaman erróneamente de «lentes», ya que los lentes son una pieza interna de un objetivo.
Ahora teniendo claro los términos, vamos a lo que importa: hablar de los tipos de cámaras:
Las cámaras DSLR (Digital Single Lens Reflex), o a veces llamadas comúnmente como «cámaras profesionales», son aquellas cámaras que utilizan los fotógrafos; eso sí, también se utilizan para filmar. Lo interesante de estas cámaras es que se adaptan a una gran variedad de presupuestos, desde las más sencillas para principiantes, hasta las más sofisticadas, que son bastante caras, pero que producen imágenes increíbles. Lo interesante de las DSLR es que para evolucionar, a veces no es necesario comprar una cámara nueva, muchas veces un objetivo diferente consigue un mejor resultado. Las numerosas combinaciones de cámaras con objetivos y rangos de precios hacen que las DSLR sean muy flexibles, ideales para producciones independientes o de bajo presupuesto.
Las camaras de los teléfonos móviles de última generación que vemos hoy en día pueden superar en calidad a una cámara DSLR de nivel básico, pero siguen siendo válidos para aquellos que quieren aprender a utilizar equipos profesionales.
También están las cámaras de estudio, que son grandes y requieren una cualificación para su uso, y también las cámaras de acción (GoPro), que son pequeñas y tienen un objetivo gran angular para grabar viajes y paisajes, por ejemplo.
2) Trípodes y estabilizadores
Sostener la cámara en la mano es a veces necesario, como por ejemplo en las escenas en movimiento, pero cuando la cámara está fija, no se puede, se necesita un trípode.
Los trípodes también están disponibles en diferentes precios y calidades. Los trípodes para cámaras son diferentes a los trípodes de luz, pero si es necesario, hay adaptadores para cambiar la función.
Ahora hablando de los estabilizadores: son dispositivos para mantener la cámara firme y evitar las sacudidas. Hay varios tipos y precios. Algunos, más sencillos, envuelven la cámara y hay un espacio para sujetarla con la mano, funcionan con un sistema de contrapesos. Hay otros que se adhieren al cuerpo del camarógrafo, y también los hay que tienen sensores y dispositivos electrónicos que ayudan en el trabajo.
3) Sonido
Un vídeo con poca resolución puede seguir siendo «visible» si el contenido es bueno, sin embargo, se puede hacer un vídeo con una cámara increíble, una fotografía maravillosa (iluminación), una atractiva intro para youtube y mucho contenido de calidad, pero si el sonido es malo, no es viable seguir con ese proyecto, es desanimador ver un vídeo con mal sonido. Por eso, debes cuidarlo.
Los equipos para grabar el sonido son: micrófono y grabadora:
Direccionales: se acoplan a la cámara y graban el sonido desde la dirección a la que apuntan, es decir, graban donde la cámara está filmando. En las cámaras DSLR hay un espacio para colocar estos micrófonos y hay un pequeño cable que se conecta a la cámara. Una vez hecho esto, la cámara comienza a grabar audio a través del micrófono externo. No se recomienda utilizar este micrófono cuando los actores están muy lejos de la cámara.
Boom: Son micrófonos que graban un área más amplia. Se colocan por encima de los actores. Requieren un soporte llamado «bastón» para sujetarse. Se conectan a una grabadora de voz, lo que requiere unir y sincronizar el sonido en la edición.
Solapa: Son esos pequeños micrófonos que van pegados a la ropa y que llevan los periodistas. Tienen mucha calidad, pero requieren que haya un micrófono por persona. Se conectan a una grabadora o a un teléfono móvil (requiere un adaptador).
Grabadoras de voz: Se trata de equipos para grabar el sonido. Disponen de micrófonos integrados y entradas para conectar micrófonos externos.
Ahora solo tienes que ponerlas en práctica
Tras el rodaje de la primera película con el nuevo equipo, llega la pos-producción. No olvides que necesitarás un software de edición para editar el vídeo y hacer algunas cosas más interesantes, como efectos y una buena introducción.
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