Áncash: trabajadores judiciales amenazan con huelga de hambre tras días de protesta

La situación en la Defensa Pública se ha vuelto crítica, ya que los trabajadores han entrado en su décimo día de protestas sin obtener respuestas satisfactorias. Esther Manrique Gamarra, defensora pública del área penal y representante de la Base Áncash de la Defensa Pública, ha expresado su frustración ante la falta de avances en las mesas de diálogo que se mantienen en Lima.

«Lamentablemente, las negociaciones no han llegado a buenos acuerdos y las autoridades parecen hacer oídos sordos a nuestras demandas», comentó Manrique.

Mesa de diálogo sin resultados

La trabajadora judicial informó que el pasado 22 de noviembre se llevó a cabo una mesa de diálogo con la esperanza de alcanzar conciliaciones, pero las autoridades no mostraron interés en encontrar soluciones.

«Hoy, 25 de noviembre, tenemos otra mesa de diálogo, y el 27 de noviembre se llevará a cabo otra más. Aún conservamos la esperanza de que el ministro pueda tomar decisiones acertadas para resolver esta problemática», sostuvo Manrique.

Impacto en el sistema judicial

Las protestas han comenzado a afectar el funcionamiento del sistema judicial, algo que preocupa tanto a los trabajadores como a la población vulnerable que depende de estos servicios. Las audiencias se han reprogramado y el sistema se encuentra sobrecargado.

«Los acuerdos son urgentes para disminuir esta carga procesal, pero las autoridades no han respondido», lamentó.

Demandas de igualdad salarial y atención a temas urgentes

Durante la protesta, Manrique también destacó las condiciones laborales precarias de los defensores públicos. Con un promedio de 2,200 trabajadores y 1,226 defensores penales, el colectivo exige igualdad salarial y atención a temas que han sido ignorados desde 2018, cuando se implementaron modificaciones en el reglamento interno sin consulta.

«Nuestro trabajo es vital y complejo, ya que abordamos delitos graves y atendemos a menores infractores, por lo que pedimos que se reconozca nuestra labor», enfatizó.

Huelga de hambre como última medida

En caso de que las demandas no sean atendidas de manera inmediata, los representantes del sector han anunciado que procederán con una huelga de hambre como medida de presión.

«Que no se pierdan las esperanzas; esta semana puede ser fundamental. Hoy nos reunimos con la comisión de presupuesto del Congreso y el miércoles dialogaremos nuevamente con el ministro», concluyó Manrique.

Los trabajadores judiciales se encuentran amenazando con acciones drásticas si las autoridades no se comprometen a atender sus reclamos, lo que podría afectar aún más la atención a los reos y el funcionamiento del sistema judicial.