La Asociación de Guías de Alta Montaña del Perú (AGOEMA) alertó que la ruta seguida por los tres estudiantes desaparecidos en el nevado Artesonraju, en la región Áncash, es una de las más exigentes y peligrosas para el alpinismo técnico. La organización también reiteró su pedido —vigente desde hace más de 30 años— de contar con un helicóptero de rescate permanente en Huaraz o el Callejón de Huaylas.
Según explicó Porfirio Cacha, presidente de AGOEMA, los jóvenes del Centro de Estudios de Alta Montaña intentaron ascender por la cara noreste y la arista norte del Artesonraju, una ruta de alta complejidad que requiere experiencia en escalada técnica y lectura precisa de las condiciones glaciares.
“Esa zona recibe sol gran parte del día, lo que afecta rápidamente la estabilidad del hielo y aumenta el riesgo de avalanchas o desprendimientos. No se trata solo de conocer la teoría; es indispensable tener práctica y tomar decisiones sobre terreno cambiante”, advirtió Cacha.
El especialista precisó que la ruta utilizada por los jóvenes presenta grados de dificultad TD+ hasta ED2, es decir, se encuentra dentro de las clasificaciones más altas de exigencia técnica en la escala alpina. “Hay tramos mixtos de hielo, nieve y roca que exigen dominio avanzado de técnicas de escalada y seguridad en glaciar. No basta con formación académica, se requiere acompañamiento profesional con experiencia comprobada en alta montaña”, remarcó.
Un pedido ignorado por décadas
Además de detallar las condiciones de la ruta, el presidente de AGOEMA recordó que el gremio lleva más de tres décadas solicitando sin éxito un helicóptero de rescate permanente para Huaraz, destinado no solo a accidentes de montaña, sino también a emergencias provocadas por huaicos, avalanchas o deslizamientos.
“Los rescates a pie pueden tomar entre 14 y 15 horas desde la Quebrada Santa Cruz hasta el Campo Alto. Esa diferencia de tiempo puede marcar la vida o la muerte de una persona accidentada. Un helicóptero puede hacerlo en minutos”, explicó.
Cacha lamentó que, pese a que Áncash es la capital del andinismo en el país, no cuente aún con una unidad aérea de rescate especializada. “Se pide hace más de 30 años y no se implementa. Es una deuda histórica con la seguridad de quienes trabajan o hacen deporte en nuestras montañas”, sostuvo.
Finalmente, hizo un llamado a las autoridades regionales, locales, al Instituto Nacional de Defensa Civil y al Gobierno Nacional para articular una respuesta concreta:
“Necesitamos que el helicóptero no solo llegue para esta emergencia, sino que permanezca como parte de una política nacional de atención a zonas de alta montaña”, concluyó.