La elección de Luis Gamarra Alor como vicegobernador regional y encargado de la gobernación ha abierto muchas suspicacias por la forma en la que se produjo. No fue producto de un consenso, como los colegios profesionales y la sociedad civil esperaban.
Lo que observamos a primera vista es que ha sido el resultado de negociaciones políticas con algunos nexos preocupantes a juzgar por la presencia de personajes como Luis Chamorro –hombre fuerte de Puro Ancash ligado al ex gobernador- y otros operadores cuestionados como David Alcántara que estuvieron detrás del telón e incluso algunos personajes del movimiento El Maicito (y que ya se afilan como asesores, proveedores y probables funcionarios).
Previa a su elección se produjeron dos hechos para el análisis: 1) Por unanimidad se pospuso la declaratoria de vacancia Waldo Ríos como gobernador para una próxima oportunidad, al advertir que no se había cumplido el plazo de notificación para que éste ejerza su derecho de defensa. 2) Por 15 votos, en cambio, se aprobó la suspensión de Enrique Vargas como gobernador encargado, pese a que –igual que en el caso anterior- no se había cumplido con los plazos de notificación, además de un recurso firmado por Vargas advirtiendo tal hecho.
Los mismos consejeros que votaron por la suspensión terminaron sumando uno más en el momento de la elección de Gamarra; mientras el otro candidato Hugo Bojórquez sólo quedó con 7.
Esta forma de obrar ha sido nuevamente puesta en tela de juicio por la defensa de Vargas quien informó que impugnarán la suspensión ante el JNE por no haberse respetado el debido proceso. Será el órgano electoral que diga su última palabra.
¿Quiénes votaron por Gamarra? Fueron, primero el sólido bloque waldista (que apoyó la enajenación de los terrenos de CHINECAS propuesto por el gobernador hoy preso) y los nuevos “tránsfugas” el mismo Luis Gamarra, Cosme Aranda, Pedro Reyes, Robert Márquez, Yolanda Bueno y el propio Pedro Izquierdo (que se oponían al despropósito contra el proyecto irrigador). Algún operador maquiavélico convenció a Gamarra a postular creando una “nueva mayoría” para generar un triunfo, triunfo que -de confirmarse las suspicacias- se tornaría en pírrico.
Pero, si como dice el ganador que, “primó el consenso” esperamos que si asume el poder honre su palabra anterior con las siguientes puntuales acciones: 1) Defender el proyecto CHINECAS, 2) Promover la transparencia para luchar contra la corrupción 3) Cero injerencia de los consejeros regionales en las UGELES, redes, direcciones regionales y otros 4) No ceder a las presiones y chantajes que desde hace mucho tiempo ejercen malos empresarios que pretenden que sus deudas por obras mal ejecutadas y sobrevaluadas quieran cobrar 5) Promover la participación de la sociedad civil y los colegios profesionales 6) Mejorar las relaciones con el Ejecutivo y 7) Designación de funcionarios con perfil profesional y probidad personal.
Si fuera todo lo contrario; se habrán comprobado nuestros temores y suspicacias. La región habrá terminado por hundirse…por culpa, del toma y daca.