Desde hace tres décadas el proyecto de irrigación para las zonas de Chimbote, Nepeña y Casma (Chinecas) es un anhelo postergado del pueblo ancashino a pesar de su alta importancia estratégica de diversificación productiva y de identidad de miles de campesinos y posesionarios.
Ante esta situación, en coherencia con los compromisos asumidos con el pueblo y en función de las facultades legislativas que me corresponde, el pasado 11 de mayo presenté la iniciativa legislativa 1368-2016-CR para recomponer la representatividad en el Consejo Directivo del Proyecto Especial Chinecas, que permita mayor participación de las instituciones vinculadas.
Es importante destacar que esta iniciativa nació de un proceso trabajado participativamente con las juntas de usuarios, comités de regantes, autoridades locales, Cámara de Comercio del Santa, autoridades locales, posesionarios, colegios profesionales, entre otros. Se trata de una propuesta consensuada con las fuerzas vivas de toda la provincia.
Pero como la tarea no es sólo presentar el documento ante el Congreso sino hacerle seguimiento en todos los frentes, propiciamos reuniones de trabajo con el ministro de Agricultura José Manuel Hernández, los gerentes de Chinecas (el anterior y el actual), autoridades y congresistas de la región, en la búsqueda de caminos posibles.
Paralelamente mis colegas Carlos Domínguez y María Melgarejo también presentaron sus iniciativas desde sus propias ópticas, las cuales en la Comisión Agraria han sido acumulados con la nuestra, lográndose un consenso en torno a la recomposición del directorio y que el gerente general será elegido por concurso público, además de la conformación de un Consejo Consultivo.
Pero mientras un grupo trabajamos por la viabilidad del proyecto, lamentablemente nos llegan noticias a partir de unos audios grabados subrepticiamente a una congresista de Fuerza Popular que pone a Áncash en el centro de la tormenta al referirse al manoseo político sobre Chinecas.
Aunque este es un tema que corresponde investigar a la Comisión de Ética, consideramos imprescindible no ahondar en las viejas prácticas de otorongo no come otorongo y que Fuerza Popular actúe acorde a lo precisado en sus procesos internos.
No podemos permitir más maltratos a nuestra región y que se juegue con las expectativas legitimas de sus habitantes, nadie tiene el derecho de humillar y tratar de manejar a su antojo las expectativas de sus habitantes.
Desde el Parlamento y bancada del Frente Amplio por Justicia Vida y Libertad, respetamos y honramos el mandato del pueblo ancashino sin necesidad de manipulaciones burdas, copia y pega de proyectos de ley, prácticas corruptas y abuso de poder.
Estamos concentrados en nuestro desafío de lograr un consenso regional y nacional con capacidad técnica y propositiva, seguimos tercamente este propósito, ahora integrando también con el gobernador regional y los consejeros que, junto a los congresistas de Áncash, la presidenta de Comisión Agraria y el ministro de Agricultura, alistamos el dictamen consensuado sobre Chinecas.
Confiamos que su aprobación significará un gran avance.
Con firmeza y optimismo.
María Elena Foronda.
