El Ministerio Público no habría podido reunir los elementos que comprueban que el expresidente regional de Áncash, César Álvarez Aguilar, tuvo participación con el crimen del exconsejero regional Ezequiel Nolasco Campos; según advirtió ayer el diario La República.

Álvarez permanece encarcelado en el penal de Piedras Gordas desde mayo de 2014, cumpliendo mandato de prisión preventiva por este caso. También tiene prisión preventiva por el sonado caso “La Centralita” y recientemente por el crimen de Hilda Saldarriaga “La Mama”, considerada testigo clave en el primer atentado que sufrió Nolasco en el 2010.

Según informó hoy Diario Correo, Fiorela Nolasco la publicación periodística que da cuenta de una supuesta exclusión de ambas autoridades en el sonado crimen ocurrido en marzo de 2014 en Huacho.

Para la hija de Nolasco, la tesis que elabora el Ministerio Público no pierde fuerza porque el exseguridad del alcalde Arroyo, Alberto Palacios Flores no sería considerado testigo principal del crimen de su padre. Muy por el contrario, señaló, que las dos personas que acompañaron al exconsejero en su viaje a Huacho “se han reafirmado en sus declaraciones”.

Fiorela Nolasco sostuvo además que Joel Cruzate Pereda “El Colombiano” – sicario confesó que asesinó a Ezequiel Nolasco – ha reiterado en el interrogatorio la supuesta participación de Álvarez. Aseveró que los dichos del asesino han sido corroborados por él mismo en Trujillo, ante la instancia policial, fiscal y luego en una sala judicial.

“Las cuatro declaraciones que ha dado ‘El Colombiano’, ha narrado cómo han sido los hechos, cómo han sido las comunicaciones (telefónicas) que fue entre ‘Goro’, el ‘Chino Malca’ y luego con el señor César Álvarez Aguilar, no lo digo yo, lo dice la carpeta fiscal (…) Las mismas declaraciones del sicario lo señalan a César Álvarez”, declaró.

Nolasco Blas defendió la actuación del Ministerio Público y se mostró confiada en que los próximos días presentará una acusación sólida respecto al crimen de su progenitor.

Fuentes cercanas al caso también han coincidido en señalar que el testimonio o la colaboración que pretendía brindar Palacios, no es “la carta de la Fiscalía” para establecer la relación entre Álvarez y los sicarios.